La necesaria reducción de los costes energéticos al tiempo que se mantiene la productividad y se reduce el impacto medioambiental se ha convertido en una obligación para grandes y pequeñas organizaciones. En este escenario, la eficiencia energética se ha convertido en una pieza clave y, para hacerla realidad, existen una serie de estrategias que las compañías pueden utilizar con este fin, optimizando su consumo y reduciendo su huella de carbono. Para conocerlas, DIRIGENTES ha entrevistado a Jofel Carregui, director general de Energer, para abordar con él los cinco pasos para impulsar la eficiencia energética en las empresas.
1. Realizar una auditoría energética
El primer paso de este proceso debe ser la realización de una auditoría que evalúe el gasto de energía que realiza la empresa. Desde Energer indican en un comunicado que esta debe centrarse en dos direcciones. Por una parte, “identificando oportunidades de mejora” en aspectos como la iluminación, la ventilación, la climatización o el uso y mantenimiento de maquinaria y equipos. Mientras que, en segundo término, también tiene que revisar la tarifa de electricidad o gas, según cada caso, para asegurar que “se adapta a las necesidades del negocio y no hay un exceso de potencia”.
2. Actualizar los equipos
Después de conocer el estado de cada área y si la tarifa contratada es la más conveniente para el negocio, el segundo paso para impulsar la eficiencia energética en las empresas debe encaminarse a una actualización de los equipos. Es decir, se deberá valorar la posibilidad de llevar a cabo una renovación por otros más eficientes que estén certificados con la etiqueta clase A de ahorro energético.
3. Integración de sistemas de energía renovable
En este camino de búsqueda de la eficiencia energética, desde Energer apuntan hacia el autoconsumo mediante el uso de energía renovable como una de las opciones a disposición de las empresas. De hecho, dentro de este punto, subrayan el uso de la energía fotovoltaica como una vía “rentable a medio y largo plazo” a través de la instalación de tejados solares o paneles. Además, también detallan tres beneficios que aporta este tipo de energía renovable: requiere poco mantenimiento, tiene una vida útil de más de 30 años y cumple con los objetivos de sostenibilidad.
Jofel Carregui, director general de Energer.
4. Fomentar la cultura de eficiencia energética
La concienciación de la plantilla sobre la cultura de eficiencia energética es fundamental para que los empleados lleven a cabo un consumo responsable y sean una parte activa de todo el proceso. Para ello, recomiendan el uso de campañas divulgativas e informativas dirigidas a todos los trabajadores.
En esta línea, la implementación de medidas utilizadas para mejorar la eficiencia energética y el autoconsumo pueden tener un impacto en la reducción del gasto energético, así como una mejora de la rentabilidad y la salud financiera de las empresas. Una prueba de ello es el beneficio económico. En una charla con DIRIGENTES, Jofel Carregui explica que “una disminución del consumo eléctrico en un rango del 10% al 30% equivale a un ahorro económico de entre el 20% y el 30%” y, en el caso del autoconsumo, dicho ahorro “puede ser incluso superior al 30%, dependiendo de otros factores como el tamaño y la configuración de la instalación fotovoltaica”.
5. Monitorear el consumo de energía
Desde Energer, el último paso para impulsar la eficiencia energética en las empresas es el monitoreo del consumo con un doble objetivo. Por un lado, identificar patrones de consumo y, por otro lado, oportunidades de mejora.
La pequeña y mediana empresa (PYME) y su eficiencia energética
Tal y como comenta el director general de Energer a DIRIGENTES, “la eficiencia energética es escalable y puede aplicarse en organizaciones de diferentes tamaños y sectores”. Así, algunos aspectos como la mejora en el aislamiento térmico de edificios, el uso de tecnologías más eficientes o el aprovechamiento de la luz natural pueden implementarse en cualquier tipo de empresa.
El experto declara que en España existen varios programas de subvenciones y ayudas financieras tanto a nivel nacional como regional que “buscan fomentar la implementación de medidas de eficiencia energética y sistemas de autoconsumo en las empresas, especialmente en las pymes”. Entre todos ellos destaca el Programa de Ayudas para la Rehabilitación Energética de Edificios Existentes (PREE 5000) y diferentes líneas de ayudas al autoconsumo dentro del marco PRTR (Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia), así como el asesoramiento especializado y gratuito a través de organismos como el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) o de los organismos competentes de cada comunidad autónoma.
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