El estudio, realizado conjuntamente entre el Instituto Santalucía y Afi (Analistas Financieros Internacionales), profundiza en diferentes aspectos como la “esperanza de vida saludable” y su evolución, los aspectos bioéticos de la longevidad y analiza además cuál es el impacto que esto está teniendo en los productos de vida y ahorro.
El informe apunta a que el crecimiento de la longevidad no parece que se vaya a detener. La consecuencia de todo ello impacta en los sistemas de bienestar y en el ámbito laboral, sanitario, de pensiones y de dependencia, por lo que las instituciones públicas deben adaptarse a esta realidad.
No obstante, para paliar este impacto, el fomento de un verdadero ahorro previsional es fundamental, de la misma forma que la industria aseguradora debe intensificar el esfuerzo en buscar soluciones innovadoras y ofrecer productos de carácter vitalicio, combinados con otros de carácter temporal, tanto de renta como de servicios asistenciales. Esto supone que no sólo se cubra financieramente durante un mayor tiempo al beneficiario, sino que también le aporten mayor calidad de vida.
En palabras de José Manuel Jiménez Rodríguez, director del Instituto Santalucía: “en este contexto de longevidad creciente, es indiscutible la necesidad de contar con un ahorro previsional que pueda cubrir todo el ciclo medio de vida estimado, que permita estar cubierto, en muchos aspectos, de cualquier eventualidad que se pueda presentar en las edades más avanzadas de la vida. Los gobiernos y la sociedad tienen que ser conscientes de que vidas más largas requerirán un capital de jubilación formado por aportaciones voluntarias (ahorro) y/u obligatorias (cotizaciones) durante muchos años. Llegado el caso, licuar el patrimonio inmobiliario puede ser una opción, pero no es la mejor vía previsional para cubrirse en las edades más avanzadas”.
Según concluye el Estudio, el sector asegurador tiene por delante el reto de afrontar la creciente longevidad y adaptarse en consecuencia, gracias a la transformación digital, para predecir la probabilidad de supervivencia y ofrecer las mejores soluciones a los individuos. Las nuevas tendencias apuntan a la personalización y a la anticipación a las necesidades de cada cliente.
2018-06-26 15:50:00