El automovilismo es uno de los sectores pioneros en la instalación de la navegación por satélite para el uso doméstico. El conocido como GPS está ahora presente en muchos aspectos de la vida cotidiana, si bien presenta un amplio recorrido en los vehículos a motor, en especial los coches. Las nuevas tecnologías han permitido una continua mejora de este producto que tiene la función principal de guiar al conductor hacia su destino, mediante mapas actualizados con la información adecuada para circular por todo tipo de vías y en unas condiciones óptimas. La tendencia apunta a una sofisticación de este servicio, que con el paso de los años ha ganado en cuanto a exactitud de los datos y coberturas, lo que se traduce en un servicio de alta calidad, ya esté incorporado directamente en el coche o de forma externa.
La navegación por satélite en un vehículo tiene un funcionamiento muy particular, con ligeros matices que la diferencian de, por ejemplo, la que encontramos en un teléfono móvil. El GPS (Global Position System) funciona gracias a la localización de un mínimo de cuatro satélites que están orbitando la tierra y que aportan la información necesaria que el programa interpreta y codifica para que el usuario la entienda. El primer paso es señalar en qué posición se encuentra el coche y para ello son imprescindibles datos como la identificación o la hora. El tiempo que necesita la señal del satélite para llegar al programa de navegación permite conocer el punto exacto en el que se ubica el vehículo.
Imagen tomada de recambioscoches.es
Una vez conocemos la ubicación, asumen su papel los mapas, es decir, la cartografía. Los primeros GPS, durante la época de los noventa y la primera década del Siglo XXI, tenían mapas guardados que se actualizaban mediante una descarga en Internet. La situación ahora es bien diferente, ya que se basa en un sistema que actualiza continuamente la información mediante una conexión en Streaming. De esta manera, la fiabilidad es mucho mayor, ya que podemos conocer con alta probabilidad de certeza la situación de una carretera, el corte de una calle o el tráfico presente en ese momento, entre otra información. El software de navegación es la herramienta que realiza la función de buscar la ruta más rápida, en función de las preferencias del usuario.
Tipos
El tamaño es un factor diferenciador en los tipos de GPS que ofrece el mercado automovilístico. Entre 4,3 y 7 pulgadas es la referencia de la mayoría de productos. Si bien 5 es el tamaño estándar, los camioneros y propietarios de vehículos de tamaño superior prefieren un modelo más grande. La mayoría presentan una dimensión horizontal, si bien es posible encontrar unidades con un formato vertical, parecido a un teléfono móvil. Los tipos más sofisticados, además, incluyen conexión Wifi, un servicio cada vez más buscado porque permite realizar una actualización instantánea de los mapas. La capacidad máxima de memoria suele estar en 32 GB, una cantidad más que suficiente, como es el ejemplo de la propuesta de Modecom. La detección de radares, el control por voz o la presencia de una cámara trasera están entre los servicios que diferencian a la oferta de navegación por satélite para vehículos.
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