La evolución del tejido empresarial español en los últimos años ha sido compleja. Con una coyuntura adversa, el número de empresas que se crea anualmente no ha recuperado las cifras registradas entre 2004 y 2007, años en los que se superaban las 130.000 constituciones, para cerrar 2022 rozando las 100.000.
De 1990 a 2019 la creación de sociedades ha vivido tres fases diferenciadas: expansión (1990-2006), crisis (2007-2009) y poscrisis (2010- 2019), para entrar en una nueva fase de recesión con la pandemia como detonante. De hecho, en 2020 se registraron solo 79.779 constituciones, un 16% menos que en 2019 y la cifra más baja desde 2010.
Más allá de la iniciativa emprendedora, un dato muy relevante a tener en cuenta es el número de empresas que consiguen mantenerse en el mercado. Si nos remontamos a las creadas en 1992, tan solo quedan operativas un 17%. Entre las que iniciaron su actividad en 2002, permanecen activas un 21% y si nos fijamos en 2012, el porcentaje de empresas que se mantienen se eleva hasta el 34%.
Además, hay que tener en cuenta que no todas las sociedades que cierran lo comunican de forma oficial. En cualquiera de los años mencionados, 1992, 2002 y 2012, los ceses no declarados superan el 15% del total.
También ha tenido lugar en España un incremento del número de empresas zombis (entendidas como aquellas cuyo rendimiento económico no es suficiente para cubrir sus gastos financieros). Si en 2021 eran algo más de 39.500, en 2022 saltaban a 47.200 y en 2023 superan las 48.000. En su mayor parte se trata de microempresas, el 83% de las que se encuentran en esta situación este año.
Con todo este preámbulo, queda claro que llegar a los 37 años de actividad empresarial, como ha hecho DIRIGENTES, no está al alcance de cualquiera. Hay que hacer las cosas bien para continuar avanzando sin perder el interés del mercado.
En los últimos años, adaptarse a los cambios originados por las nuevas tecnologías, manteniendo la calidad y con un espíritu innovador, ha sido clave en cualquier actividad, pero más si cabe en todas aquellas relacionadas directamente con los datos y la información. La evolución y adaptación constante es lo que nos permitirá seguir creciendo.
Las empresas españolas se enfrentan a nuevos retos, con unos niveles de exigencia en aumento, tanto por parte de la sociedad como de los legisladores y los in- versores, para que desarrollen su labor de una forma sostenible.
Los temas relacionados con el medio ambiente, la responsabilidad social y la gobernanza (ESG) cobran mayor peso en la estrategia de las empresas de varias formas, ya que refuerzan su competitividad al mejorar su reputación, las hace más atractivas ante los inversores y las coloca en una mejor posición para responder a desafíos, como los relacionados con el cambio climático.
Y esto no afecta solo a las grandes empresas, es relevante para compañías de cualquier tamaño. Si queremos competir en el mercado del futuro tenemos que tener claro que debemos incluir la sostenibilidad como uno de los ejes estratégicos.
En este sentido, INFORMA y DIRIGENTES comparten la misión de ayudar a las empresas españolas a tomar las mejores decisiones para su negocio, bien como proveedor de informes para la gestión del riesgo comercial o descubriendo las mejores prácticas y estrategias de negocio, respectivamente. Estamos convencidos de que siguiendo el camino trazado en estos últimos años, con honestidad y transparencia, es posible seguir avanzando hacia un modelo empresarial cada vez más comprometido. Y por eso desde INFORMA queremos trasladar a DIRIGENTES una merecida:
¡Enhorabuena por vuestro número 400!
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