La medicina era la doctrina que iba a guiar la carrera profesional de Vanesa Díaz, sin embargo, se decantó por ser ingeniera en telecomunicaciones, descubriendo lo que se convertiría en su verdadera pasión. Lo que sí era claro es que esta mujer llegaría a ser todo un ejemplo a seguir del sector tecnológico, convirtiéndose en la CEO de una de las pocas compañías en todo el mundo dedicada a los sistemas de seguridad cuántica.
Con motivo del Día Internacional de la Mujer Emprendedora, DIRIGENTES entrevista a Díaz, quien nos sumerge en los retos técnicos, burocráticos y humanos a los que ha debido enfrentarse en sus más de 20 años de experiencia en la industria de las fibras ópticas.
Al preguntarle por cómo se embarcó en el proyecto de LuxQuanta, Vanesa tiene claro que vio “la posibilidad de sumarme a una pequeña empresa con un gran potencial, dentro de un sector que siempre me había apasionado”, aun siendo parte, en sus inicios, del departamento de Desarrollo de Negocios.
“No pasó mucho tiempo antes de que empezara a disfrutar de las diferencias que ofrece trabajar en una startup: el dinamismo y los increíbles desafíos que se nos presentaban. Poco después, tuve la oportunidad de liderar el equipo como Directora”, asegura la CEO de LuxQuanta quien, actualmente, tiene la responsabilidad de “liderar nuestra visión, estrategia, inversiones y, lo más crucial, nuestro equipo.”
Un arduo camino en el que trabajará hasta cumplir el sueño que comparte con el resto del equipo: “Hacer crecer a LuxQuanta hasta convertirla en líder mundial en la industria de comunicación cuántica. Mi objetivo personal es lograrlo de tal manera que nuestro equipo se sienta nutrido diariamente con entusiasmo y un sentido de pertenencia, reconociendo la importancia fundamental que tienen en nuestro éxito durante el increíble viaje que emprendemos juntos”.
Cuenta con más de 20 años de experiencia en el sector. ¿Cómo ha evolucionado su carrera hasta liderar el equipo LuxQuanta?
Me formé en ingeniería de telecomunicaciones de manera inesperada, alejándome de mi aspiración original de ser médico. Después de desempeñar roles técnicos durante varios años, mi carrera alcanzó un hito significativo al pasar más de una década en Corning Optical Communications. Durante mi tiempo allí, contribuí al desarrollo del mercado y negocio.
Sin embargo, el capítulo más reciente, y uno de los más emocionantes de mi carrera comenzó en diciembre de 2021, cuando me uní a LuxQuanta como gerente de desarrollo de negocios. En tan solo un año, asumí el rol de CEO de la empresa, liderando un equipo excepcional y llevando a LuxQuanta hacia nuevos horizontes en la industria de comunicación cuántica.
¿Podría identificar cuáles son los retos a los que se ha enfrentado en todos estos años de carrera?
A lo largo de mi carrera, he enfrentado una variedad de retos, tanto técnicos como burocráticos o humanos, de todos los colores y formas. Continúo enfrentándome a una multitud de desafíos. Diría que el elemento común para superar cualquier adversidad es mantener una mente abierta con sed de aprendizaje y estar dispuesto a reconocer lo mucho que aún queda por aprender.
Aprendiendo y disfrutando del proceso, uno puede sortear los retos de manera más efectiva. El aprendizaje debe ser multidimensional y acompañado de un crecimiento personal necesario en cada etapa. Y, sobre todo, es crucial mantener la fe en uno mismo para no desistir frente a los problemas que puedan surgir.
¿Qué pasos planea en el futuro más próximo para que LuxQuanta mantenga la posición de referencia en el mercado global?
En el futuro cercano, nuestros pasos clave para mantener a LuxQuanta como líder en el mercado global incluyen la optimización continua de nuestra tecnología y la colaboración constante con empresas destacadas en el sector. Sin embargo, nuestra visión va más allá, y estamos dedicando considerables recursos a una línea de investigación destinada a reducir los costos de producción y lograr la industrialización a gran escala.
Nuestro enfoque se centra en la integración completa del circuito óptico en un chip fotónico integrado. Este avance tecnológico no solo representa un salto significativo en eficiencia, sino que también nos permitirá llegar a un mercado mucho más amplio. Al mismo tiempo, garantizará la seguridad de las comunicaciones a una escala mucho mayor.
Vanesa Díaz, CEO de LuxQuanta
¿En qué consiste la innovación en CV-QKD? ¿Cómo se aplica a la seguridad cuántica y a las comunicaciones?
La criptografía cuántica QKD, o "Distribución Cuántica de Claves" (QKD), radica en la generación de claves criptográficas mediante propiedades de la física cuántica. Estas claves, al no depender de algoritmos matemáticos, son resistentes incluso a ataques de computadoras cuánticas.
La variante con la que trabajamos, mucho más reciente y conocida como "Variable Continua", sigue el mismo principio con diferencias interesantes. Codificamos la información cuántica para generar claves criptográficas en las ondas de luz, en lugar de en fotones individuales. Esta característica nos permite implementar e instalar los sistemas en fibras ópticas existentes, eliminando la necesidad de desplegar fibras dedicadas solo a nuestro sistema.
Esta adaptabilidad facilita la adopción de la tecnología en fibras ópticas ya en uso, lo que promueve una transición más sencilla hacia la seguridad cuántica para gobiernos y empresas, al tiempo que asegura la protección de los datos más críticos ante futuras amenazas.
LuxQuanta ha sido elegida por la Comisión Europea para liderar QUARTER. ¿Cómo actuarán para implementar una red de seguridad cuántica para las comunicaciones europeas?
La implementación de esta red ya ha comenzado. A la par que la Comisión Europea nos asignaba fondos a los fabricantes europeos de QKD para madurar y preparar nuestra tecnología, también subvencionó los primeros despliegues en todos los países miembros. Así que nuestros sistemas ya están siendo instalados en las primeras redes que se van a desplegar en numerosos países de la Unión Europea.
Mientras tanto, desde LuxQuanta seguimos trabajando en el marco del proyecto QUATER con nuestros socios, con quienes podremos evolucionar nuestra tecnología para poder cumplir con los estándares de seguridad y operabilidad más exigentes, para así poder manejar y proteger las comunicaciones en esta red cuántica europea, el EuroQCI. Mas allá de la solución gubernamental, también queremos permitir un despliegue masivo de nuestra tecnología para otros verticales, como por ejemplo operadoras de telecomunicaciones, centros de datos, u hospitales puedan tener acceso a una tecnología QKD asequible y de fácil instalación. En este sentido, estamos desarrollando una versión de nuestra tecnología basada en fotónica integrada, que nos permitirá reducir notablemente los costes, haciendo que sea asequible para su implementación a gran escala.
¿Vanesa Díaz se ha formado para ser líder o es algo innato?
La capacidad de liderazgo se desarrolla a lo largo del tiempo, y aunque algunos puedan tener ciertas inclinaciones naturales, nadie nace siendo un líder experto. En mi caso, he continuado aprendiendo y evolucionando en este papel. Durante mis años en Corning, tuve la oportunidad de aprender valiosas lecciones, especialmente de superiores y gerentes cuyo enfoque ejemplar dejó una marca indeleble en mi desarrollo como líder.
En LuxQuanta, mi enfoque es equilibrar la ambición y el esfuerzo con una dirección humana arraigada en mis valores, considerando a cada miembro del equipo. Reconozco que el liderazgo es un aprendizaje constante, y estoy comprometida a seguir creciendo en este camino en el que la evolución es una constante.
¿Qué echa en falta en el mercado para que no se tenga que trabajar por el liderazgo femenino y sea igual de natural que el de los hombres?
Creo que estamos avanzando en la dirección correcta, tomando las medidas apropiadas, apoyando el talento femenino, motivándolo y dándole visibilidad. Las mujeres que vamos alcanzando posiciones donde tenemos notoriedad debemos ser valientes y no perder nuestra esencia. Preservar, independientemente del rol al que lleguemos, aquellos aspectos de nosotras que nos diferencian y, por tanto, añaden valor, es fundamental si queremos cambiar las cosas.
En un momento concreto de mi carrera me di cuenta de que estaba intentando mimetizarme con mi entorno profesional eminentemente masculino, y que en el proceso no solo me estaba perdiendo a mí misma, es que no estaba consiguiendo cambiar absolutamente nada, y peor aún, estaba perdiendo fuerza para hacer bien mi trabajo. Reconocer que no podía, no quería y no debía perder lo que me hace diferente solo por encajar fue liberador y muy empoderador. Esta más que demostrado: las empresas con una cultura inclusiva que fomentan la diversidad entre sus empleados aumentan su rendimiento.
¿Qué consejos daría a otras mujeres que aspiren a triunfar en la industria de la tecnología o la ciencia?
Es muy difícil dar un consejo universal porque cada una de nosotras somos una combinación muy concreta de circunstancias personales y profesionales. Desde luego lo que nos toca es seguir peleando por lo que creemos que nos merecemos, no es un camino sencillo, pero hay mucha gente en la que podemos confiar y apoyarnos, desde jefes, compañeros de trabajo, mentores, amigos, familia…
Tenemos que pedir, pedir más, sin complejos, escuchar que nos digan que no y que nos lo argumenten. Si creemos que hemos llegado a un techo de cristal y nuestras circunstancias personales lo permiten, saltar a otra empresa, a otro proyecto. Puede que no sea una opción fácil porque, en función de en qué momento de nuestra carrera y también personal nos encontremos, el cambio puede ser más complicado, pero desde luego, levantarse por las mañanas sabiendo que estas empleando absolutamente todo tu potencial es una sensación maravillosa por la que vale la pena el esfuerzo.
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