Para Ángel Bascuñana Acero, chief evolution officer de esencial, la meta de la organización que dirige es construir empresas prósperas mediante una evolución del negocio desde dentro. Es decir, “identificando las fortalezas y promoviendo un cambio de mentalidad y de hábitos”. No obstante, para que este planteamiento se convierta en una realidad, la confianza y la seguridad psicológica de todos los miembros del equipo representan dos piezas fundamentales en todo el proceso.
Lleva más de una década dedicado al mundo empresarial. ¿Cuáles son los principales errores que cometen los dirigentes a la hora de gestionar sus equipos con independencia del entorno de actividad?
En primer lugar, dar por hecho que las cosas están claras. El mayor problema de la comunicación es creer que ha tenido lugar. Hay que proponer definir unas reglas de comportamiento explícitas que todos tienen que respetar, y acabar todas las reuniones con un QQQ: Qué se va a hacer, quién lo va a hacer y cuándo se va a hacer.
En segundo lugar, decirle a la gente lo que tienen que hacer. Las personas se comprometen con aquello que ayudan a crear. Un buen manager podría inspirar dando una visión y dejando a la persona responsable definir el plan para hacer realidad dicha visión. Por último, confundir delegar con abdicar. Las personas quieren autonomía, no abandono. Cualquier relación sana requiere generar un entorno seguro en el que dar feedback de manera directa, honesta y recurrente. Sin estas condiciones el equipo no crecerá y se acabará marchitando.
El principal objetivo de esencial es construir organizaciones más prósperas con el fin de impulsar la diferenciación y la rentabilidad. ¿Cómo lo hacen posible?
Trabajamos en la evolución del negocio desde dentro, identificando las fortalezas y promoviendo un cambio de mentalidad y de hábitos. Un cambio de mentalidad implica reconocer lo que está funcionando y, sobre ello, generar una visión inspiradora de forma que las personas se vean a sí mismas como una parte fundamental de un sistema que contribuye a un bien mayor.
Sobre este cambio de perspectiva y principios, acompañamos a las personas en el proceso de desaprender viejas conductas y aprender nuevas habilidades, sustituyendo las acciones inconsistentes por hábitos productivos que refuerzan la nueva realidad.
¿En qué consiste SON -Sistema Operativo de Negocios- y cómo propone su implementación?
SON es un conjunto de principios y herramientas que se apoyan en 5 prácticas:
• Talento. Seleccionar a las personas correctas para los puestos correctos.
• Estrategia. Conectar con la esencia para dar dirección.
• Gestión. Situar primero lo importante y hacerlo posible.
• Liderazgo. Impulsar la comunicación en un entorno seguro y retador.
• Valor. Colaborar y mejorar de manera continua.
La implementación requiere, entre otras acciones, meterse en el negocio y entenderlo al máximo; conocer al equipo y alinearlo; mejorar la comunicación y la gestión internas; modificar los procesos de selección, evaluación y recompensa; y asignar líderes que empujen los nuevos proyectos.
¿Por qué es tan importante la confianza dentro de los equipos?
La confianza es el pegamento en cualquier relación entre personas. Para que exista confianza se necesita seguridad psicológica, es decir, sentir que podemos preguntar, reconocer errores y proponer ideas sin miedo. Sin confianza, las personas no se atreven a sacar a la luz los problemas, se guardan sus buenas ideas para ellas y evitan discrepar o entrar en debate, lo cual limita el compromiso y la inteligencia colectiva.
Como consecuencia, el aprendizaje se para y la innovación se bloquea. En un mundo que va tan rápido, imaginemos las consecuencias que esto puede traer para la empresa.
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