Según informa Reuters, los analistas han afirmado que las empresas de relojes y artículos de lujo de empresas conocidas del país como Swatch y Richemont serán probablemente las más perjudicadas, por el desequilibrio entre los ingresos en monedas extranjeras y los costes en casa. Otras multinacionales suizas, como el grupo de alimentos Nestlé, la ingeniera ABB o las farmacéuticas Novartis y Roche estarían mejor protegidas por sus operaciones en los mercados locales de todo el mundo. "Podemos esperar una oleada de recortes de previsiones de beneficios en las empresas suizas", señaló Pascal Bernachon, analista del banco parisino KBL Richelieu.
Ante la perspectiva de un plan de compra de bonos masiva por parte del Banco Central Europeo que podría haberle obligado a intervenir en varias ocasiones en los mercados de divisas, el Banco Nacional de Suiza eliminó el tipo de cambio mínimo para el franco suizo frente al euro, en una decisión que sorprendió a los mercados.
El brusco varapalo bursátil restó aproximadamente cien mil millones de dólares de valor de las acciones de las grandes empresas de Suiza, el mayor retroceso en una sesión que se recuerda. El selectivo suizo SMI cayó hasta un 13%, con Swatch, Richemont y la firma de biotecnología Actelion entre los mayores perdedores, con descensos entre el 14 y el 17%.
Las exportaciones suizas representan alrededor de un tercio del producto interno bruto (PIB), con un fuerte peso de los productos químicos y farmacéuticos, instrumentos de precisión, aparatos de relojería y joyería, maquinaria, electrodomésticos y aparatos electrónicos. El mayor socio comercial del país es la Unión Europea, un bloque al que se ha resistido a unirse. El segundo país con mayor volumen de intercambios comerciales es Estados Unidos.
El turismo es también una parte importante de la economía, contribuyendo aproximadamente con el 3% del PIB y con un 5% de la fuerza laboral en la industria de hoteles y restaurantes, sobre todo en pequeñas y medianas empresas.
La decisión del banco central se produce en plena temporada alta del esquí en el país alpino y una semana antes del Foro Económico Mundial, la reunión anual de las élites políticas y sociales del mundo en la estación de esquí suiza de Davos.
Made In Switzerland
El repunte del franco significa que la etiqueta de "Hecho en Suiza" utilizada por las compañías de lujo como una marca de calidad para impulsar las ventas en los mercados exteriores ya no es una ventaja. "Swatch, Richemont y otros grupos de productos de lujo lo tendrán difícil", dijo Neil Wilkinson, gestor de fondos europeo en Royal London Asset Management. "Para impedir esos riesgos en el futuro en última instancia tienes que trasladar tu estructura de costes a un lugar diferente. Pero es más fácil decirlo que hacerlo. Para Swatch, lo que hace único el producto es que estás vendiendo un reloj suizo y la mayoría de la gente quiere que su reloj suizo se fabrique en Suiza". Esta situación no es igual para empresas como Nestlé, Novartis, Roche, Syngenta, Credit Suisse y UBS, cuyos ingresos y gastos son en gran parte en las mismas monedas.
Roche , que tiene alrededor de 17% de sus gastos de explotación en francos suizos, dijo que su amplia diversificación de gastos e ingresos mitigaría el impacto de la subida del franco. Novartis tenía el 12% de sus gastos en francos en 2013. Las empresas químicas Clariant y Syngenta con solo un 4-5% de sus costes en francos, se verían mínimamente afectadas, dijo el analista de Baader Bank Markus Mayer, mientras que Nestlé también tiene menos del 5% de sus gastos en francos, según James Targett de Berenberg.
Los analistas de Citigroup estiman el impacto negativo sobre las ganancias de Richemont entre el 5 y el 9% en 2015 y 2016, a pesar de que probablemente sería mitigado por el precio del oro, el poder adquisitivo y nuevos recortes de costes. En el caso de Swatch, dijo que el aumento en el franco podría costar entre el 8 y el 10% de sus ganancias y el grupo afirmó que no tiene cubiertos los riesgos de divisas. "¡Me faltan las palabras!", dijo el director general de Swatch, Nick Hayek. "La decisión del banco central de hoy es un tsunami para la industria de exportación y para el turismo y en definitiva para todo el país".
Por su parte, la Federación Sindical Suiza dijo que la decisión del banco "pone en peligro de manera masiva los salarios y el empleo en la industria de exportación y eleva el riesgo de deflación en Suiza". Gary Paulin , cosocio fundador de la firma de valores de renta variable Aviate Global, señaló repercusiones para las empresas fuera de Suiza , incluidas las aerolíneas con vuelos a las estaciones de esquí suizas como Ryanair. "Malas noticias para los que van a esquiar en Suiza, de golpe se ha hecho un 20% más caro", dijo.
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