Una maleta perdida, overbooking, asistencia sanitaria o hasta entrar en un país. Hay un sinfín de acontecimientos ajenos a nosotros que pueden alterar completamente el curso de unas vacaciones y que podrían ser un mero trámite si se planificaran como una parte más del viaje. Y es que nos resistimos a pagar por tener un seguro cuando la realidad es que, si comparamos lo que nos costaría con el precio que puede llegar a alcanzar un problema en el extranjero, no lo pensaríamos tanto. Coverfy, aplicación que permite gestionar seguros desde el dispositivo móvil y optimizar precios y coberturas, nos da las claves para realizar un viaje sin sobresaltos. Si vas a realizar un viaje organizado, la agencia está obligada a incluir en el precio un seguro mínimo ante situaciones como el retraso de un vuelo, anulación del viaje, overbooking o repatriación del cuerpo en caso de fallecimiento. No hay que ponerse tan dramático pero puede suceder. Así que infórmate bien antes de firmar nada. Los temas relacionados con la salud son más complicados puesto que cada país tiene su propia forma de cubrir esos gastos. Por ejemplo en Estados Unidos romperte una rodilla y que te ingresen para operarte peude acabar costando 35.000 €. Por eso es recomendable hacer con la Tarjeta Sanitaria o hacerte con un seguro de viaje que te proporciones cobertura de hasta 100.000 € por unos 35€. Incidentes tan habituales como robo, pérdida o daño de equipaje, tampoco suelen estar contemplados en los seguros mínimos. Y hay países como Cuba o Rusia donde el seguro de viaje es obligatorio para poder entrar.
hemeroteca
