El Parlamento Europeo ha refrendado este miércoles el acuerdo sellado entre Reino Unido y la Comisión Europea. El presidente de la Eurocámara, Antonio Tajani, ha reconocido esta desconexión como un paso importante que permite pasar a una segunda fase. En su discurso tras la aprobación de la resolución, agradeció la labor de todos los países, así como de las tres instituciones europeas por «la transparencia y la determinación» con la que se ha trabajado para conseguir finalmente un acuerdo. La resolución sobre las negociaciones con Londres ha sido apoyada por 556 eurodiputados, con 62 votos en contra y 68 abstenciones. Asimismo, el pleno recibió con satisfacción el informe conjunto sobre el progreso de los trabajos presentado el 8 de diciembre por los negociadores de ambas partes. Sin embargo, Tajani ha resaltado que la firma de dicho pacto y su aprobación por el Parlamento no significa que se hayan resuelto todos los problemas, porque sigue habiendo preocupaciones para los europeos sobre cómo continuará el proceso de separación. Principalmente en lo que se refiere a los derechos de los ciudadanos europeos que residen en Reino Unido. Por su parte, el negociador de la Unión Europea para el Brexit, Michel Barnier, se ha comprometido a llevar a finales de enero el texto legal que contenga los detalles ya pactados. En las próximas semanas por lo tanto, se pondrá todo por escrito para poder continuar con la segunda fase de las negociaciones. Todos los ojos estarán puestos en el coste que llevará la salida de la UE, que se ha calculado en 60.000 millones de euros, según el propio Tajani, los derechos de los europeos residentes en Reino Unido, así como la gestión de la frontera con Irlanda del Norte. Los grupos parlamentarios en la Eurocámara han respaldado en su conjunto el acuerdo pero han insistido también en la necesidad de que desde Reino Unido se confirme el carácter vinculante del mismo. «No aceptaremos ningún paso atrás con respecto al informe conjunto todos los avances constan en acta, se tienen que traducir rápidamente en un acuerdo de salida jurídicamente vinculante», ha subrayado Barnier. El próximo viernes los jefes de Estado y de Gobierno darán luz verde al acuerdo de divorcio. A partir de entonces ya no se volverá a retomar la desconexión de Reino Unido de la UE sino cómo se construye la relación futura entre los británicos y los europeos. Será entonces cuando Reino Unido tendrá que pelear los acuerdos comerciales. Desde el club comunitario todavía no se tiene claro qué modelo busca Reino Unido, si el noruego o el suizo. Respecto al coste que tendrá para la UE, el presidente del Parlamento Europeo ha señalado en reiteradas ocasiones que ningún país europeo tendría que pagar por el error que supone el Brexit, decisión única de los británicos. Un aspecto respecto al que se han pronunciado algunos parlamentarios. El Portavoz del PP y vicepresidente primero del Grupo PPE en el Parlamento Europeo, Esteban González Pons, ha indicado que el éxito «será que se alcance un Brexit que no parezca un Brexit». «Este acuerdo no es el final de nada, es simplemente el principio de todo. Es un acuerdo político con muchos cabos sueltos desde el punto de vista técnico que ahora se tendrán que atar. Hemos hecho lo más fácil, ahora viene lo más difícil», ha sentenciado.
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