La producción industrial en Alemania cayó un 4% en el mes de agosto frente al ajuste del 1% que esperaban los expertos. Este retroceso supone la mayor caída desde enero de 2009 según los datos que ha publicado la oficina federal de estadística alemana, Destatis.
Este dato se suma al conocido el lunes sobre los nuevos pedidos manufactureros que sufrieron una caída del 2,5% en agosto frente a la mejora del 4,9% en julio.
Las razones que hay detrás del deterioro de la economía alemana son varias, pero destaca la creciente tensión geopolítica con Rusia, el debilitamiento de China y Francia y el recorrido inflacionista que puede suponer una fracción dentro del Banco Central Europeo.
La reacción en el mercado
Los inversores han tenido varios motivos este martes para replegar posiciones. A pesar de que el Ébola empieza a ser un factor que pesa a la baja, los datos macro también han tenido mucho que decir. El Dax alemán registra pérdidas del 0,85% hasta los 9.131 puntos.
Entre los valores que cotizan en el indicador, Lufthansa es la compañía que mayores pérdidas registra con una caída superior al 3%. Commerzbank y RWE ceden más de un 2%; mientras que Deutsche Bank, EON, Thyssen Krupp, Deutsche Post y Siemens bajan un 1%.
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