Un Gobierno desorientado cambia de versión tras tres días sosteniendo la hipótesis del suicidio. En una carta publicada en Facebook, medio de comunicación habitual de la presidenta del Gobierno, Cristina Fernández de Kirchner da un giro y apunta ahora hacia el asesinato.
"No tengo pruebas, pero tampoco tengo dudas", señalaba Kirchner en Facebook que contradice su anterior versión en la que se preguntaba "qué fue lo que llevó a una persona a tomar la terrible decisión de quitarse la vida".
La jefa de Estado asegura ahora que "el suicidio no fue suicidio" dando por hecho que Alberto Nisman fue asesinado. Además, Kirchner también apuntó que a Nisman "lo usaron vivo y después lo necesitaron muerto. Así de triste y terrible".
Ahora, el Gobierno argentino cree que Nisman fue asesinado por la misma persona que le dio las pistas falsas para acusar a la Presidenta. Mientras continúa la investigación y el Gobierno cambia de hipótesis, la sociedad argentina se muestra conmocionada e incrédula al estar viviendo uno de los episodios más grave de su historia.
Alberto Nisman denunció a la presidenta Cristina Fernández por encubrir, presuntamente, el atentado con coche bomba que se produjo en 1994 en al sede de la Asociación Mutual Israelita-Argentina (AMIA). En dicho atentado murieron 85 personas y otras 300 resultaron heridas.
En su acusación, Alberto Nisman también incluyó al ministro de Exteriores, Héctor Timerman de conspirar para que la investigación criminal no prosperara para no enturbiar sus relaciones con Teherán y, por tanto, el acuerdo para importar petróleo no se encareciera.
Nisman, de 51 años, había asegurado que disponía de grabaciones que acreditaban su acusación por lo que, este lunes tenía que declarar en la Comisión de Legislación Penal en la Cámara de Diputados tras la petición de la acusación.
"El muerto 86"
El suceso, aún por esclarecer, ha despertado la indignación ciudadana ya que el Gobierno baraja la hipótesis de un suicidio. "Se va a investigar si hubo algún tipo de inducción o instigación a través de amenazas", señaló Viviana Fein, la fiscal que lleva el caso. Pero, independientemente de la investigación, los ciudadanos que creen que la muerte de Nisman está relacionada con el caso AMIA salieron a la calle a protestar señalando que el fiscal es "el muerto 86".
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