Los expertos en tecnología ponen de manifiesto la necesidad que tiene Meta de encontrar una especialización ‘tech’ para lograr un crecimiento de negocio. Estar presente en todas las vanguardias digitales, sea el metaverso o la Inteligencia artificial, pero no liderar ninguna, es lo que está llevando a la matriz de Facebook a modificar su propósito y virar en sus políticas corporativas.
La búsqueda de un liderazgo de su empresa en la economía digital coincide para Zuckerberg con la llegada de Donald Trump, lo que explica, sin duda, la necesidad de romper con el discurso globalista y las narrativas ‘woke’ y acercarse a los postulados más próximos al ‘Maga’ de Donald Trump.
Todo cambio relevante en Meta empieza con un video de su fundador. Pasó con la creación de la compañía y el inicio de las operaciones en el metaverso. Y sucede ahora con el cambio en el desarrollo no financiero de la organización.
El primer síntoma del giro corporativo fue el cambio en el programa de verificación del contenido de Facebook, cuyo enfoque le había distanciado sustancialmente de su competidor, X – antes Twitter-, compañía de Elon Musk. Fue el propio Zuckerberg el encargado de anunciar un modelo muy similar al diseñado por la red del aspa, en el que la comunidad se ocupa de anotar, contextualizar o advertir las posibles desinformaciones.
Hasta ahora, esta función estaba delegada en empresas y profesionales del periodismo de verificación, como las empresas españolas Newtral o Maldita; o la empresa pública EFE, a través del recién creado programa EFE Verifica.
La salida de Clegg, ex político centrista y responsable de las políticas globales de Meta, para ascender como nuevo directivo a su mano derecha en la compañía, podría entenderse como una decisión habitual de cualquier organización. Sino fuera porque quien se desempeñará en el rol será Joel Kaplan, ex subdirector de gabinete de la Casa Blanca en la Administración Bush y un republicano afín al presidente electo Trump.
Hace escasas horas hemos tenido conocimiento, a través de Janelle Gale, vicepresidenta de Recursos Humanos, de la supresión del programa DEI de Meta. Se conoce como DEI a los programas de diversidad, equidad e inclusión de cualquier organización privada.
En una nota interna, Gale explica que el término se había vuelto «controvertido ya que algunos lo perciben como una práctica que sugiere un trato preferencial hacia ciertos grupos».
Entre las iniciativas que Meta suspende se encuentra su estrategia social de contratación, el ‘Diverse Slate Approach’, que aseguraba la participación diversa de candidatos y fomentaba una mayor representación de mujeres y minorías étnicas en la empresa. Además, Meta dejará de priorizar la selección de proveedores pertenecientes a negocios de propietarios diversos.
La alternativa que ofrece Meta a esta suspensión es reemplazar los programas DEI por otros con enfoques que promuevan prácticas justas y consistentes, destinadas a mitigar sesgos para todos, independientemente de su origen.
Este distanciamiento de la tecnológica con las tesis globalistas en favor de las tesis conservadoras del Make America Great Again, coincide también con un acercamiento personal de Mark Zuckerberg con el propio Trump, a quien acaba de donarle 1 millón de euros.