"Estimo al país y a su presidente del Gobierno, pero cuando me dicen que nuestro modelo debe ser el de un país que tiene el doble del desempleo me preocupo". Estas fueron las palabras de Matteo Renzi, primer ministro de Italia, en su dircurso en el parlamento transalpino.
Renzi se mofa así de las palabras de la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, que hace unas semanas situaba a España como el único país de la Zona Euro que progresaba para frenar el desempleo. La canciller alemana, Angela Merkel, también elogió el modelo de reformas económicas del Gobierno de Mariano Rajoy.
Pero Renzi no. Renzi prefiere decir que "se ríe" cuando los organismos internacionales alaban las reformas llevadas a cabo por nuestro país. Es curioso que el primer ministro de un país que se encuentra en recesión realice estas declaraciones. Recordemos que el Producto Interior Bruto (PIB) de Italia en el segundo trimestre del año se contrajo un 0,2% respecto a los tres meses anteriores, cuando ya había bajado un 0,1%, lo que implica la recaída del país transalpino en recesión técnica al encadenar dos trimestres consecutivos en negativo.
Estos datos suponen un mazazo para el Gobierno de centro-izquierda de Matteo Renzi, que contaba con la reanudación del crecimiento para cerrar sus presupuestos, luchar contra el desempleo y contener la deuda del país. Quizá el mandatario italiano debería observar de las reformas llevabas a cabo por otros países europeos y tomar nota, para intentar levantar la economía de su país, en vez de mofarse en público de los esfuerzos de otros.
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