El Ibex no aguanta la presión y pierde los 9.800 puntos

La apertura a la baja de Wall Street ha arrastrado a las bolsas europeas, temerosas de la guerra comercial de cifras que se ha desatado entre Estados Unidos y China. Aunque todos conocen que el impacto total de los aranceles no servirá para reducir el déficit comercial entre ambos países ni es de un volumen suficiente como para preocuparse, los inversores temen la dirección que puede tomar la escalada del enfrentamiento, sobre todo teniendo en cuenta el carácter cambiante de Donald Trump.

El presidente norteamericano onfirmaba el viernes la noticia que venían temiendo los inversores: la imposición de aranceles del 25% a importaciones chinas por valor de 50.000 millones de dólares sobre productos que contienen «tecnologías industrialmente significativas». Incluso se llegó a rumorear que los gravámenes podían ascender a 100.000 millones de dólares. China, por su parte, dijo que respondería con aranceles del 25% a un total de 106 productos importados de EEUU, entre los que figuran la soja, automóviles y aviones, por valor de 50.000 millones de dólares.

Por su parte, William Dudley, de la FED, advirtió también sobre la guerra comercial, al decir que puedan atascar la capacidad de la economía de EE.UU. También dijo que el camino fiscal que lleva el país es insostenible y que podría afectar a los tipos de interés hasta el año 2020.

De momento, el Ibex se ha dejado más de un 1% por segunda sesión consecutiva, perdiendo los 9.800 puntos, en una semana donde van a ser claves dos citas económicas: el foro anual del Banco Central Europeo (BCE) en Sintra (Portugal), donde se abordarán los precios y la fijación de salarios en las economías avanzadas. Y la reunión de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo), que se celebra en medio de debate sobre si la organización podría poner fin el acuerdo para recortar la producción de crudo.

Así, la mezcla indicada de políticas en Estados Unidos se asocia con la apreciación de la divisa. En terreno norteamericano, esa mezcla ha llegado al extremo. La última vez que tuvimos un escenario parecido (política monetaria estricta y fiscal relajada), Estados Unidos terminó absorbiendo gran parte de los ahorros del mundo entero. La recuperación del dólar desde los años 70 generó déficits comerciales enormes, déficits de cuenta corriente crónicos y una reacción proteccionista, que derivó en la reunión del G-7 en septiembre de 1985 en la que se acordó una intervención coordinada sostenida para forzar hacia abajo al dólar.

Hoy en Europa, la política fiscal es ampliamente neutral según Chandler, mientras que Japón está reduciendo gradualmente su déficit y planea subir el impuesto a las ventas en octubre de 2019. Estas consideraciones hacen que la mezcla de políticas de EEUU tenga efectos aún más potentes.

En Europa estamos asistiendo a momentos dramáticos en lo relativo a la inmigración. En el Reino Unido, el gobierno tiene serias dificultades para navegar entre los anti-europeos, mayoría en el equipo, y los pro-europeos del Parlamento, hacia el Brexit. La controversia se centra en el control de sus fronteras, básicamente, en estos momentos. Si el gobierno llegara a caer la semana que viene cuando se vote un posible acuerdo en el Parlamento, la libra esterlina sufriría con cierta intensidad y si May es sustituida por una persona claramente a favor del Brexit duro, esta caída sería intensa en valor y duración.

Y en Alemania, las crecientes tensiones en el gobierno de Angela Merkel podrían provocar su fin, tumbando también al euro. Merkel se está embarcando en un intento de coordinación de las políticas inmigratorias en Europa como una forma de sostener una alianza que canalice este enrome problema y a la vez le permita sostener a su gobierno en un entorno de regeneración económica general aquí.

Con todo, el mercado de materias primas y el petróleo en particular van a estar muy pendientes de la próxima reunión de la OPEP el viernes que podría alterar el comportamiento del crudo en los próximos meses.

inicio

Add a comment

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *