A pesar de que para muchas compañías la sostenibilidad sigue ocupando una posición secundaria, muchos dirigentes ya están comprendiendo su potencial para transformar las empresas desde dentro hacia fuera. En una entrevista con DIRIGENTES, Andrea Montes, Senior Consultant y especialista en sostenibilidad de Design Bridge and Partners, explica que estamos evolucionando hacia un modelo integral que sitúa la sostenibilidad en el centro de las decisiones estratégicas y que es capaz de aportar valor a la sociedad.
Además, en este contexto destaca también el papel que está jugando Iberdrola como una compañía que presenta un modelo de negocio que integra la sostenibilidad en el centro de su propuesta de valor y que, como marca, “esto se ha traducido en un ejercicio estratégico, verbal y visual”.
¿Qué papel juega en la actualidad la sostenibilidad dentro de las empresas?
La realidad con la que nos encontramos es que, en muchos casos, todavía sigue ostentando un rol secundario, enfocado principalmente en cumplir con las exigencias legales básicas y alejado del planteamiento estratégico del negocio. Si bien es cierto, la presión social y normativa sí que está empezando a dibujar un nuevo panorama empresarial, mucho más sensible a la sostenibilidad y que entiende el potencial de ésta para transformar las organizaciones desde dentro hacia fuera.
¿Podría hacer una valoración del crecimiento de este elemento dentro de las organizaciones?
Tradicionalmente la sostenibilidad formaba parte de las políticas de Responsabilidad Social Corporativa de las compañías, siendo un departamento estanco que planteaba acciones tácticas para compensar la actividad empresarial. Sin embargo, estamos presenciando la evolución de este enfoque sostenible hacia un modelo integral que sitúa la sostenibilidad en el centro de las decisiones estratégicas como una variable imprescindible a tener en cuenta, no sólo para responder a lo que exige el mercado y las audiencias, sino también para aportar valor a la sociedad y el entorno desde las compañías.
Hoy, más que nunca, las empresas deben ser agentes transformadores capaces de impactar positivamente a nivel social, ambiental y económico desde su actividad de negocio.
¿Cómo propone hacer que las iniciativas sostenibles tengan un rol estratégico en las compañías?
Lo esencial es tener claro hacia dónde vamos como compañía. Nuestro propósito debe ser nuestra guía y llenarlo de significados y realidades será nuestra hoja de ruta para el trabajo diario. En base a él, debemos alinear todos nuestros esfuerzos consiguiendo que nuestro propio enfoque sostenible esté presente en todos los niveles de la compañía, en nuestros procesos, desarrollos y en la forma en la que nos relacionamos con nuestros grupos de interés.
¿Cómo se debería promover que los esfuerzos en sostenibilidad tengan un reflejo en la estrategia de marca de las compañías?
Alinear nuestra Estrategia de Sostenibilidad con nuestra Estrategia de Marca se consigue entendiendo que nuestra compañía también debe tener su propia voz a la hora de hablar de ESG. Para capitalizar nuestros esfuerzos en sostenibilidad debemos hacer que éstos alimenten nuestro propósito y nos ayuden a dar respuesta al impacto positivo que queremos generar desde nuestro negocio, pero bajo el paraguas de nuestra personalidad y expresión como marca.
¿Cuáles son los principales retos que surgen cuando apuestan por la integración?
Destacaría los dos retos más habituales. El primero es el cambio de mentalidad y de cultura corporativa en aquellas compañías con un amplio histórico que no contemplaba la sostenibilidad como un criterio relevante en el negocio. El segundo es la importancia de mantener la coherencia en el discurso sostenible. Es relativamente sencillo perder el foco de lo que somos como marca y tratar la sostenibilidad como un ente aparte. Por eso, es imprescindible integrarla como un activo transversal que nos ayude a crear valor siendo fieles a lo que somos para que así podamos, también, reforzar nuestra diferenciación.
¿Podría analizar algunas de las empresas que están liderando este ámbito y explicar las estrategias que han seguido?
El caso de Iberdrola, por ejemplo, es uno de los más notorios. La compañía presenta un modelo de negocio que mira hacia el futuro e integra la sostenibilidad en el centro de su propuesta de valor y, como marca, esto se ha traducido en un ejercicio estratégico, verbal y visual que no deja ninguna duda de la visión comprometida e innovadora de la compañía. La clave está precisamente en eso, en conseguir que negocio y marca sumen fuerzas para que la sostenibilidad se convierta en una realidad tangible y diferencial en toda la experiencia generada por la organización.
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