El Índice de Evolución Digital, creado por la Escuela Fletcher de la Universidad Tufts, pinta un panorama sombrío de la situación de la innovación tecnológica en el viejo continente. Los 10 países con las puntuaciones más negativas en este sector están en Europa, salvo Australia.
Para los países nórdicos como Noruega y Finlandia, que tienen una tradición histórica en innovación, el índice sirve como una advertencia de que están perdiendo impulso. Según señala Bloomberg, basta con mirar lo que pasó con Nokia, que llegó a ser el mayor fabricante de teléfonos móviles.
Por su parte, las naciones asiáticas son una vez más las que encabezan esta lista de innovación. Singapur ocupa el primer lugar como el país más innovador digitalmente, pero además, los tres primeros en la lista, también provienen de la región del Mar Meridional de China.
Por poner un ejemplo de este territorio, China está cambiando poco a poco; pasando de ser la fábrica del mundo, al país donde empresas tecnológicas están empezando a retar seriamente a los líderes mundiales en telecomunicaciones, dispositivos móviles y servicios online. Este auge de las empresas chinas es en parte consecuencia del enorme esfuerzo en I+D+i que se está realizando en este país. Según un estudio de Battelle Memorial Institute en un post sobre innovación y China en 2014 se alcanzó la cifra de 284 billones de dólares, un 22% de crecimiento desde el año 2012.
Otro reciente estudio de PwC confirma además, que los directivos senior de las empresas chinas están apostando decididamente por innovación en productos y servicios, cadenas de valor y modelos de negocio. Están apostando también en tecnología y conocimiento. Pero lo más interesante es el papel fundamental que los directivos senior dan a la innovación como parte de sus estrategias de globalización.
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