El ministerio de Hacienda ha publicado la orden HFP/94/2023, de 2 de febrero, por la que se aprueban los diferentes modelos para el nuevo impuesto temporal sobre las empresas energéticas y la banca. Así, a través de este texto se han creado los siguientes modelos correspondientes a los dos nuevos tributos y a su pago anticipado:
- 795, Gravamen temporal energético. Declaración del ingreso de la prestación.
- 796, Gravamen temporal energético. Pago anticipado.
- 797, Gravamen temporal de entidades de crédito y establecimientos financieros de crédito. Declaración del ingreso de la prestación.
- 798, Gravamen temporal de entidades de crédito y establecimientos financieros de crédito. Pago anticipado.
En ambos impuestos, la autoliquidación definitiva se presentará entre el 1 y el 20 de septiembre, aunque es este mismo mes cuando las entidades afectadas deben abonar el 50% del importe de presentación calculado. Pese a que se ha retrasado la fecha de inicio por no estar los modelos preparados, la fecha límite de presentación no varía: el 20 de febrero. Además, las declaraciones deben presentarse por vía electrónica.
Descontento en el sector bancario
La Asociación Española de Banca ha argumentado que si los bancos se ven obligados a pagar 3.000 millones de euros en impuestos que el Gobierno pretende recaudar, reduciría su capacidad de préstamo en 50.000 millones de euros porque disminuye la cantidad de capital regulatorio que pueden mantener contra dichos préstamos.
El impuesto a los beneficios extraordinarios de la banca grava un 4,8% el margen de intereses y las comisiones netas de las entidades que facturaron más de 800 millones en 2019. A las críticas del sector se ha unido la del Banco Central Europeo, que argumentó que podría dañar las posiciones de capital de los bancos, perturbar la política monetaria, además de resaltar la dificultad de su aplicación.
En el caso de la tasa a las compañías energéticas, no se aplicará a todas las del sector, sino que se reserva a aquellas que facturaron más de 1.000 millones en 2019. En concreto, se aplicará un tipo del 1,2% sobre la cifra de negocio. Con esta nueva tasa, el Gobierno ha calculado que podría recaudar alrededor de 4.000 millones de euros entre este año y el que viene.
¿Qué es un impuesto sobre las ganancias extraordinarias?
Un impuesto sobre las ganancias extraordinarias es un gravamen adicional impuesto por un gobierno a una empresa. La idea es apuntar a empresas que se benefician de algo de lo que no son responsables, en otras palabras, una ganancia inesperada. En el contexto actual, las empresas energéticas están obteniendo mucho más beneficio a raíz del conflicto en el este de Europa y los bancos están rentabilizando en los últimos meses de la subida de tipos de los bancos centrales para controlar la inflación.
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