El vehículo eléctrico aún queda lejos de ser una realidad en Europa. Sin embargo, según datos de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA), el crecimiento en las ventas de estos vehículos sigue creciendo. En el primer trimestre de 2016, las matriculaciones de vehículos eléctricos recargables alcanzaron las 36.322 unidades, y en el mismo trimestre de 2017, fueron 47.196. Los híbridos también siguen en auge, con un crecimiento del 61,2% en el primer trimestre del año. Incluso los vehículos movidos por gas han aumentado un 10,4% en este periodo. Parte de estas cifras se entienden gracias a los distintos incentivos fiscales de los que gozan este tipo de vehículos más respetuosos con el medio ambiente. Sin embargo, estas rebajas de impuestos no son iguales en todos los países miembros del bloque comunitario. La ACEA ha elaborado un breve resumen con los distintos incentivos que se puede conseguir en cada país. – Rebaja en el impuesto de matriculación Una buena parte de los países europeos cuenta con algún tipo de rebaja en cuanto a este impuesto para los vehículos eléctricos o energéticamente eficientes. En algunos, los vehículos eléctricos o con pocas emisiones de CO2 están exentos de pagarlo, por ejemplo en la región belga de Flandes, Chipre, Grecia, Hungría o Portugal. En otros, se les aplica la tasa mínima para este impuesto o una rebaja considerable. Por ejemplo, en Irlanda, hasta diciembre de 2021 los eléctricos están exentos de los 5.000 primeros euros del impuesto de matriculación (las cifras se reducen en función de las emisiones). Y en Eslovaquia, los eléctricos pagan la tasa mínima del impuesto de matriculación (33 euros). – Incentivos para la compra En Austria, desde enero de 2016 existe una deducción en el IVA aplicable a los vehículos de cero emisiones. Por ejemplo, el sistema de Francia funciona a base de penalizaciones y bonus, en el que los vehículos eléctricos que emiten entre 21 y 60 gramos de CO2 por kilómetro pueden recibir hasta 1.000 euros; y si contaminan menos, hasta 6.300. Además, en Francia se otorga 10.000 euros a quienes cambian su vehículo diésel por uno eléctrico. En Alemania, desde julio de 2016, el gobierno alemán otorga un bonus medioambiental de 4.000 euros para los vehículos 100% eléctricos y de 3.000 euros para los híbridos. En Eslovenia hay ayudas de entre 3.000 y 7.500 euros a la compra de vehículos eléctricos de cero emisiones o híbridos enchufables que emitan menos de 50 gramos de CO2 por kilómetro. Y en Suecia hay subvenciones de 40.000 coronas suecas (algo más de 4.000 euros) para la compra de vehículos de cero emisiones, o de 20.000 coronas (2.000 euros) para los que emitan entre 1 y 50 gramos de CO2 al kilómetro. – Rebaja en el impuesto de circulación Es otro de los principales incentivos de los que gozan este tipo de impuestos, incluso en España. En países como Bulgaria, Alemania, Hungría, Italia, Rumanía o Reino Unido, los vehículos eléctricos o con ciertas emisiones no pagan el impuesto de circulación, ya sea de manera permanente o durante varios años. En otros países, los vehículos eléctricos pagan la tasa mínima de este impuesto, como en Bélgica, Irlanda o Luxemburgo, o gozan de algún tipo de reducción, como en Suecia. En España los incentivos para la compra de vehículos no contaminantes quedan lejos de alcanzar a los de otros países. Según la ACEA, algunos ayuntamientos están reduciendo el impuesto de circulación para los coches eléctricos o energéticamente eficientes hasta en un 75%. – Ningún incentivo Cinco países no cuentan con ningún tipo de exención fiscal para los vehículos eléctricos: Croacia, Estonia, Lituania, Malta y Polonia.
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