¡Ojo! El Internet de las cosas, no es seguro

El llamado Internet de las cosas, es decir, la corriente de lo smart destinada a cambiar la interacción del ser humano con su entorno mediante la conexión de cualquier objeto a la red lleva tiempo acaparando la atención en los mayores festivales de tecnología. Este es el caso del CES 2015, celebrado recientemente en Las Vegas, y donde estos dispositivos conectados han sido los protagonistas por excelencia.

Sin embargo, según las previsiones de la firma española Vector ITC Group, uno de los principales objetivos de los hackers este año será precisamente el Internet de las cosas. El auge de este tipo de aparatos les convierte en la víctima perfecta para los ciberdelincuentes. Estos nuevos dispositivos se conectan a Internet y almacenan información privada sobre las personas que los utilizan.

Tanto es así, que uno de los principales objetivos de la seguridad durante este año es protegerlos mediante soluciones de seguridad. Una tarea difícil porque cuantos más dispositivos estén conectados, más puertas de acceso tendrán los cibercriminales para lanzar sus ataques.

Según algunos expertos, estos dispositivos pueden servir de puente a los ciberdelincuentes para atacar a otros terminales conectados a la misma red, como puede ser una tableta o un smartphone que generalmente contienen datos más personales o información financiera, el objetivo final de muchos hackers, que buscan obtener un beneficio económico.

Mientras se lanzan estas sólidas soluciones, los usuarios deben hacer todo lo posible para evitar la intromisión siguiendo, por ejemplo, estos consejos para proteger el hogar.

1. Cambiar las contraseñas por defecto de absolutamente todo.

Normalmente, muchos aparatos del hogar traen contraseñas tipo, creadas por la empresa que los ha fabricado. Es muy recomendable cambiarlas por un código propio y secreto.

2. Separar las "cosas" de las cosas realmente importantes.

A medida que la casa está cada vez más conectada, una solución es, por ejemplo, separar los ordenadores que usan los niños, menos concientes de la seguridad en línea, de los PCs centrales o equipos en los que se almacena la información más sensible.

3. Deshabilitar la vista remota.

Aunque es importante que las cámaras de vigilancia graben incluso cuando no haya nadie en casa, existen otros dispositivos de imagen, como los monitores de bebes o webcams, que es conveniente desactivar cuando no sea estrictamente necesario.

4. Asegurarse de que las defensas del router están al día.

Las computadoras Windows, por ejemplo, se actualizan solas, y eso podría hacerle creer a algún usuario que su router hará lo mismo; pero no es así. Actualizarlo puede ser un poco incómodo en ocasiones, y con ello no se solucionarán todos los problemas, pero sin dudas, merece la pena hacerlo.

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